Cuando los meses duran 3 días….

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No significa que se cumpla aquello de que ‘el tiempo pasa volando’, no. Lo que intento reflejar es un sentimiento que por desgracia se extiende cada día más en la sociedad en la que nos encontramos hoy en día.

Espero que no estéis en esta situación pero por lo menos si lo estáis, espero que os pueda sacar una pequeña sonrisa este reflexión.

Mucha gente en este país está en la situación de que los meses duran 3 días, el anterior al día del cobro de la prestación de desempleo, el del cobro y el siguiente.

En el primero la tensión sobre la posibilidad de tener dinero pone a todos a alerta. El día del cobro, el nerviosismo de ver el dinero ingresado nos desborda. Y el tercer día entra la depresión al constatar que del ingreso del día anterior ha conseguido con suerte tapar agujeros que estaban abiertos.

Pero lo peor es la sensación de que ya no hay nada más que hacer hasta estos 3 días del mes siguiente.

Paso de 50, ¿no le soy rentable a ninguna empresa ya?

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Cansado estaba cuando era joven de oir en entrevistas de que poseía un perfil ideal para tal y cual puesto, pero …. que necesitaba experiencia.

Ahora, cuando atesoro y desbordo experiencia y busco recolocación después de haber caído en el desempleo y pasar a ser parado de larga duración, me canso de escuchar lo de ‘es que la edad…’, ‘es que el puesto exige una energía,…’,…

¿Por quñe antes y ahora se ríe el mercado laboral con nosotros y juega al gato y al ratón?

No conozco yo un recien licenciado con experiencia, así como tampoco se de alguien de más de 40 años con más de 15 de trayectoria profesional que no la tenga. Entonces empleadores ¿qué narices queréis?

Os lo voy a decir rápidamente.

Queréis un joven experimentado dispuesto a trabajar sin horario, con remuneraciones con suerte de 820 euros al mes, que no proteste y sea servil y que, a poder ser renuncie a todos sus derechos fundamentales como trabajador y que sea gratis el despedirlo. ¿A qué acierto?

5 millones, ¿qué piensas hacer?

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Este post es fruto de una conversación mantenida con mi amigo Felipe García el pasado martes en nuestra tierra Galicia y en la que mantuvimos un cambio de impresiones sobre todo ‘lo actual’ que nos rodea.

Excelente ‘motivador’ como es él, me comentaba una charla que tuvo recientemente que dio a un grupo de desempleados y de la cual me ha surgido esta reflexión de hoy.

¿Alguien se cree que con 5 millones de parados y un mercado laboral como el que tenemos se puede ofrecer formación a los desempelados para que encuentren trabajo? ¿No será mejor dar una charla motivacional para que en cada uno que se encuentre por desgracia en el paro crezca la semilla de las ‘ansias’ de salir de esa situación?

Imaginaros una presentación. Primera diapositiva que ponga ‘5 millones de parados’. Segunda diapositiva que ponga ‘que coño piensas hacer’. Se acabó la presentación.