No hay mejor sensación que meterse en cama con la conciencia tranquila de que has hecho en el día lo mejor posible. Eso es indicio de que vas a dormir bien.
En tu trabajo te han encomendado una tarea y has dado lo mejor de ti para realizarla y el resultado ha sido el satisfactorio. Pero, no obstante, quien te la ha encargado no cree lo mismo, o por lo menos, no ha demostrado la satisfacción que tu sientes. Consideras que mejor no lo podrías haber hecho, con lo que tendrás la conciencia tranquila, y además el resultado obtenido es el esperado. Pero tu jefe no da muestras de satisfacción. ¿Has tenido éxito en tu quehacer diario?
Y es que por desgracia, en esta sociedad, la satisfacción con uno mismo y con lo que hace no guarda correlacción con el éxito personal o profesional.
Cualquier persigue hacer las cosas día a día como debe pero si no hay alguien que te reconozca el trabjo realizado ¿existe realmente el éxito?
La satisfacción personal es un estado de ánimo propio, interno a cada uno, mientras que el reconocimiento, el éxito, nos viene dado como un factor externo.
Ambos sentimientos son subjetivos, pero con la diferencia de que uno es nuestro y el otro es interno a un tercero.
¿Cuántas veces habéis pensado que algo que habéis hecho sería algo exitoso y nadie os lo reconoció? Y viceversa ¿cuántas algo que no considerábais como bien acabado fue reconocido con éxito?
Y ahora lo que viene son las dos preguntas del millón para hoy:
¿Qué prefieres, ser una persona satisfecha internamente o una persona exitosa externamente?
¿Qué hay que hacer para ser una persona exitosa?
A la primera voy a contestar sencillamente. A la segunda no tengo respuesta, porque si la tuviera, sería a lo mejor una persona exitosa, cosa que no lo soy.
Yo prefiero ser una persona satisfecha con lo que hace día a día, aunque el reconocimiento externo no se produzca. Haciendo siempre lo que está en tu mano, nadie te puede reprochar nada y menos a tú a ti mismo. Dormir con la conciencia tranquila no tiene precio, como diría Mastercard.
Cierto es que a nadie le amarga un dulce, y de vez en cuando el éxito, aunque efímero, gusta. Pero con la forma de pensar que yo tengo, cualquier cosa por pequeña que sea se valora como un éxito incalculable.
Cuando lo que prefieres es el éxito a tu conciencia interior, corres el riesgo de actuar como no eres, con lo cual el éxito es algo completamente artificial.
Hay personas de todo tipo y ambas posturas son igualmente respetables, pero yo creo que van asocaidas a personalidades distitas de los individuos.
La segunda pregunta, es posiblemente la respuesta más buscada junto la ‘fórmula de la Coca-Cola’. Si alguien sabe la clave para tener éxito reconocido y externo que levante la mano.
Aparte de ser caduco, es muy voluble, ya que terceras personas son las que te dicen el éxito o no de lo que haces y hay muchas terceras personas en el mundo ¿Puedes contentar a todo el mundo? Claramente la respuesta es que no, entonces ¿para qué preocuparte por el éxito o reconocimiento en grado máximo? Siempre habrá alguien, muchos o pocos, que considere que lo que haces es un éxito y justo lo contrario, que considere que es un fracaso total. Pero por lo mneos lo que haces lo haces con la conciencia tranquila eso es algo que nadie te lo podrán quitar nunca.
Buenos días a todos,
A mi opinion, en un mundo ideal las personas serian
satisfechas internamente i exitosas externamente. Como no es así me pregunto…
«¿Nos falta vendemos mejor o comunicamos mejor?»
«¿Qué podemos hacer para mejorar la meritocracia en nuestras empresas?»
«Qué hacen las mejores empresas para sacar lo mejor de sus empleados?»
«¿Por qué no hay mas cursos , seminarios, programas en cómo se aplica la meritocracia en la empresa?»
Saludos a todos
Hola José Luís,
Me gusta el planteamiento y el tema elegido.
Lo más importante es estar satisfecho con lo que uno hace a lo largo de su vida, obviamente si llega el éxito y el reconocimiento mucho mejor pero eso ya no depende de uno mismo en muchas ocasiones. El éxito es efímero y a veces injusto porque no todo el mundo que triunfa es que mejor hace su trabajo.
El estar contento con lo que uno hace y consigue a lo largo del día es un gran logro aunque muchas veces no le demos valor. Todos nosotros tenemos criterio para saber si las cosas que hacemos están bien o mal, otra cosa es que interese o no darse cuenta.
Saludos,
Juan
Buff!!! amigo Christopher, muchas preguntas de difícil respuesta.
Lo ideal sería que la satisfacción personal por lo realizase fuese unida al reconocimiento externo como una especie de ‘justipremio’ por el trabajo realizado. Pero en el mundo de las organizaciones no suele ser así. Lo peor es cuando el ‘justipremio’ se convierte es ‘dedopremio’, porque es cuando la desmotivación de los miembros del equipo es total.
dentro de las organizaciones no creo que sea problema de venderse bien o mal, creo que el problema está más que no hay un concreto plan de premios y reconocimientos a los trabajadores. Mas bien funciona todo de forma aleatoria.
Un saludo
Buenas Juan.
La verdad es que da juego, porque la dualidad ‘hacer lo que considero bueno/hacer lo que consideran bueno’ es ni más ni menos el arte de la supervivencia dentro de las organizaciones.
Hay quiene prefieren estar a gusto consigo mismo y dormir tranquilos.
Pero hay muchos que lo que quieren es ‘aparecer en la foto sea como sea’. Y abundan mucho más de lo que nos creemos.
La cuestión está en ¿cuánto tiempo pueden vivir así? porque no me cabe dda de que es una actitud estresante ya que estás siempre pendiente de lo que digan los demás.
Ciertamente conmigo no va.
Un saludo amigo
Estoy de acuerdo José Luís,
Quizas que en lugar de ser de forma aleatoria podría ser un nuevo reto para RRHH. ¡Manos a la obra!
Saludos
Christopher
Yo les animo a ello amigo, pero creo que en muchas empresas se sigue viendo al departamento de RRHH como el ‘que hace las nóminas’ exclusivamente, por lo tanto para darle el poder, deberían de darle medios.
Un saludo amigo
Buenas tardes, Jose Luis y lectores:-).
El éxito es algo muy subjetivo, y dependerá de cuál sea tu objetivo. Y tiene mucho que ver con tu personalidad, va muy ligado.
Una persona desinteresada (uso este adjetivo reiterando la opinión de Juan que comparto también), seguramente estará mejor entendiéndose consigo misma (estando segura y satisfecha con sus acciones), que buscando el reconocimiento, porque lamentablemente, pocas veces alguien que tenga más valor que su jefe (que no el líder), será reconocido por el mismo, a no ser que su jefe sea un buen líder.
Respecto a la conciencia más o menos tranquila, es relativo. Una persona que no obra bien o no hace las cosas bien, y aquí también pongo mis peros al comentario de Juan, no tiene porqué ser consciente de ello al margen de que pueda interesarle o no serlo; no todos tienen conciencia interior, o su conciencia busca el pretexto que reafirme su actitud aunque ésta no sea la correcta, de forma que esa persona tiene la conciencia más tranquila que la que obra correctamente, y piensa que hace lo correcto.(y quizá lo haga, no sé).
Y os pongo un ejemplo laboral: te dan un trabajo y a conciencia cometes un error , del que sabes que será tu superior el que tendrá que asumir las consecuencias porque no te concierne esa responsabilidad.
En mi caso, ese ejemplo que os he puesto no lo he aplicado nunca, pero quizá sea yo la que esté errando. Eso sí, duermo bien por las noches, al igual que estoy convencida que muchos sicarios en el sentido literal de la palabra, también:-).
Porque a fin de cuentas, obrar bien o mal es un concepto subjetivo que dependerá de los valores de cada individuo (espero haberme explicado bien…).
No se puede contentar a todo el mundo del mismo modo que no podemos gustar ni caer bien a todo el mundo. Lo mejor, es ser uno mismo y aceptar las limitaciones, que no resignarse, y así uno mismo , al menos, tendrá éxito en sus circunstancias y sabrá sacar el mejor provecho para sus valores personales y profesionales.
Un abrazo.
Buenas amiga.
Lo que esta claro es que estamos ante dos sensaciones subjetivas. La clave está en como nos afecten a cada uno.
Quien asume que nunca podrá contentar a todos y por lo tanto que el éxito es siempre relativo, no sufrirá y luchará por alcanzarlo, lo llevará con toda naturalidad.
Si embargo aquel que antepone el exito externo y el reconocimiento de terceros como clave en su forma de actuar, lo que está claro que acabará sufriendo mucho en esta vida, porque nunca se puede contentar a todo el mundo.
Lo importante es conocerse y saber que has dado siempre lo mejor de ti en todo momento, con lo cual poco más te puedes pedir a ti mismo.
Un saludo Begoña
«El éxito es la materialización progresiva de un gran sueño». Frase que me hace reflexionar.
Buenas amigo.
Cierto como la vida misma que el éxito suele ser fruto de un continuo trabajo y de hacer bien las cosas. A pesar de eso, últimamente el realizar las cosas bien no lleva directamente al éxito ya que la competencia es brutal y los beramos de éxito y no éxito cambian continuamente. Cada dia es mas cierto que el éxito es efímero.
Un saludo