Visto lo visto, y queriendo darle un toque de humor a lo que parece va a ser el más que negro año 2012, voy a dejaros este post con la intención de que sirva como mecha de un pensamiento positivo para que, en caso de que se cumplan las premoniciones y expectativas negativas, os sirva como reflexión y que intentéis ver el lado positivo de las cosas.
¡¡Siiii!!, ya se que las Leyes de Murphy en muchos casos son irrefutables, pero siempre podemos verles el lado positivo. Además, lo que siempre nos queda es el título del post: ‘Sonríe… mañana será peor’.
Tener siempre presente que las cosas se echan a perder en proporción directa a su valor, con lo cual tomaros las cosas sin agobios y minusvalorar los problemas siempre, ya que sino parecerán mayores de lo que realmente son.
Y es que para eso tener siempre en cuenta la Ley de la gravedad selectiva: Un
objeto caerá donde cause mayor daño. Entonces, ¿para qué haceros mala sangre?
En nuestra mano está el afrontar las cosas que vienen en el 2012 e intentar sacar lo positivo de cada una de ellas, no se os ocurra creer la máxima de que dentro de cada gran problema, siempre hay uno pequeño que lucha por abrirse paso y recordar que bajo presión, las cosas empeoran.
Las limitaciones las ponemos nosotros mismos y está en nuestra mano el evitarlas o sencillamente el no limitarnos en nada. Si es vuestra organización la que pensáis que os limita, consolaros con que en una jerarquía, cada empleado tiende a ascender hasta su nivel de incompetencia además del hecho de que un ejecutivo quiere multiplicar el número de sus subordinados, no de sus rivales.
Recordar algo realmente verídico y es el hecho de que todo el mundo tiene un plan que no funciona.
Como corolarios a estos pensamientos, considerar que, si hay una probabilidad de que varias cosas salgan mal, saldrá mal la que cause mayor daño así como que la probabilidad de que algo ocurra es indirectamente proporcional a nuestro deseo de que ocurra.
Por lo tanto, no os preocupéis demasiado y ser felices, ya quela persona que puede sonreír cuando las cosas van mal ha pensado en alguien a quien culpar y que el número de hipótesis que puede explicar un fenómeno dado, es infinito.
Hola José Luis:
Hoy se deben haber conjurado los planetas porque mi post también va de sonrisas y, curiosamente el de otro blog que sigo también. Eso sí, discrepo en eso de que si uno puede sonreir cuando las cosas vam mal es que se ha pensado en alguien a quien culpar. Haberlos hailos como las meigas, pero no creo que sea general.
Un abrazo amigo
Jajaja, cierto amigo, pero no me negarás la querencia que tenemos los españoles a escurrir el bulto de forma asombrosa y quedar ‘como santos’, jejejeje.
Cierto que los caminos del Señor son inescrutables, pero recurriendo al sabio refranero español, ‘piensa mal y acertaras’, 🙂
Un abrazo amigo
Bueno, no sé que te pasó el día que escribiste este post, pero bueno… Murphy tuvo en ti a su mejor portavoz 😀
Yo tengo una teoría que voy a compartir contigo, y con tus lectores: ¿Te acuerdas de que aquella historia que se basaba en la pregunta «Que harías tu si el mundo se acabara mañana»?
Y yo creo que nos toca a todos hacer algo parecido. O bien nos resignamos y preparamos para resistir los palos que vamos a recibir durante el próximo año ya que todo pinta como pinta, o bien nos buscamos la manera de re-inventarnos nosotros mismos y buscar la forma de que los palos le caigan a otros (en el buen sentido de la palabra, por supuesto)
A lo que me refiero es a que siempre tenemos dos opciones (o más): rendirnos sin pelear, o dar la batalla más grande que hemos dado en nuestra vida.
Si miramos atrás, las grandes empresas han sido creadas por hombres que en su momento decidieron hundir su pie en el acelerador y lanzarse a fondo, dando lo mejor de sí mismos.
¿Qué vamos a hacer nosotros? ¿Qué va a hacer cada uno de nosotros?
Jajaja, este post fue en un momento de lucided hilarate diría yo o bien de alegría incontenida 🙂
Lo cierto que fue una forma de conseguir distender a los seguidores y conseguir que por lo menos por un día no se impregnase de ‘mal rollo’ el blog 🙂
Un abrazo.
Ojalá que todo el mundo se contagie de positivismo para enfrentar cada día del resto de los días que nos quedan por caminar.
Hace un par de días, estaba «picando puertas» (como dicen acá) y entré en un restaurant – cafetería. Imagínate como era el ambiente, la energía que se transpiraba en el lugar que en lugar de «Buenas tardes» les tuve que decir a todos: «Por Dios, seamos positivos que el mundo necesita gente positiva»
Se rieron e inmediatamente comenzaron a contarme las razones de sus largas caras. Es como un «porfiado»… esos muñecos que aunque golpees con todas tus fuerzas, nunca se caen y vuelven al mismo sitio.
¿Qué se le va a hacer?
Buenos días amigo Joel. ¿Sabes cuál es el problema amigo Joel? Que se contagia enseguida lo maol pero lo bueno no, y además como ahora no abunda este último, la cosa está en cuesta abajo. Por lo tanto, o ponemos algo de nuestra parte nosotros o mal iremos 🙁
Un abrazo