Muchas veces he hablado de las características que un líder debe de poseer si quiere actuar como tal y no como un jefe más. Hoy voy a detenerme en una de estas características, o mejor dicho, cualidades, que a mi modo de ver es una de las más importantes, como es la humildad.
Y es que, aunque parezca mentira, es una de las cualidades fundamentales en una adecuada gestión del liderazgo.
Se trata de una cualidad que no enseñan las escuelas de negocios ni los masters que uno realice por muy caros que sean, sin embargo es indudable que los subordinados ven en su líder esta cualidad como una de las más importantes.
El líder humilde reconoce el éxito como del grupo mientras que se autoculpa de los fracasos del mismo, cosa que tendréis que reconocer que no es cosa fácil y que si agradecen los miembros del equipo.
Es una cualidad innata por eso hemos de analizarla con cuidado.
Puede darse el caso de que la humildad pueda inspirar debilidad, dependiendo en el entorno organizacional donde se mueva el líder. Ser humilde puede provocar una pérdida de involucración de los miembros de su equipo al ver que lo negativo de su trabajo se lo asume otro y lo bueno se lo atribuyen a él.
No llegará al buen líder con ser humilde, sino conseguir que eso no implique una pérdida de respeto de sus subordinados ni el hecho de que sea vista como una debilidad de la cuál se puedan aprovechar, con lo cual deberá de ser una cualidad innata y que deberá de saber manejar, con lo cual la cosa se complica y no llega con ser solamente humilde.
Una frase recoge esta idea: ‘una cosa es ser bueno y otra muy distinta es er tonto’.
La gestión de la humildad en el liderazgo bien gestionada es uno de los elementos más inspiradores en un equipo y, sobre todo, uno de los factores que motiva que los miembros del equipo sigan a un líder motivándolos para sacar el máximo talento y por lo tanto, los mejores resultados para el equipo.
Los líderes humildes suelen rodearse de gente que se anima a hablar y a opinar, sobre todo cuando tienen puntos de vista alternativos que pueden significar un crecimiento para el grupo.
Los líderes humildes están tan seguros de sí mismos que están dispuestos a buscar ayuda cuando sea necesario, así como a intensificar la búsqueda del apoyo de todos los miembros del equipo ante los grandes retos que se plantean al mismo.
Saludos José Luis, excelente artículo. Estoy completamente de acuerdo contigo. La humildad es una de las fortalezas más poderosas de un líder. En mi opinión, la humildad hace que el equipo vea al líder como un ser humano igual que ellos y les llena de inspiración y orgullo como parte del equipo. Líderes humildes son los que más han impactado mi vida personal y profesional.
Buenas amigo Victor.
Das en el clavo con tu razonamiento. La humildad es la cualidad que convierte a cualquiera en más humano y accesible a los demás, es una muestra de generosidad hacia terceros, y eso, para cualquier subordinado poder percibirlo en un superior es un símbolo de saber que se está bien dirigido, de poder confiar, …, en definitiva, de saber que tu destino está en buenas manos.
La pena es que la humildad brilla por su ausencia en todos los líderes actualmente 🙁
Un saludo