A riesgo de que me eche a la hoguera la ‘Inquisición 2.0’ (que se que me estáis observando aunque creáis que no lo se) hoy voy a hablar de un tema que muchos hablamos, pero siempre como los primeros cristianos, ‘en las catacumbas’.
Se que no va a ser un post muy bien visto, pero es que realmente me da igual. Muchos pensamos lo mismo lo que pasa es que no se dice nada, y realmente no se porque.
De hecho, este título es fruto de una conversación mantenida con un amigo blogger alrededor de lo acontecido en el pasado EBE en el que me comentaba su experiencia, y del cual no voy a decir su nombre porque con que me echen a mi sólo a los leones llega (pero el ya sabe quien es).
Y es que está ocurriendo un hecho últimamente que va interrelacionado, como es el unir todo lo que rodea al 2.0 con el ‘Net-Working’ , como si ambas cosas fueran sinónimos de ‘buen rollito’ y de ‘amigos para siempre’.
Y es que aunque parezca mentira, el llevar el apellido 2.0 para nada hace que el ‘buen rollito’ aflore entre la gente.
Es más, por desgracia, cada día el mundo 2.0, que iniciaba su andadura con el halo del compartir, se esté convirtiendo en un reflejo claro de lo que es el 1.0, con sus envidias, rencillas y miserias.
Pero es que esto es normal, ya que el 2.0 no es más que el reflejo de lo que uno es en el 1.0.
Diréis que yo soy un claro ejemplo de eso. Pues si o pues no, cada uno es libre de opinar lo que considere correcto.
En Galicia a esto del ‘Net‘ o sea ‘crear red’, lo llamamos de un modo más sencillo: ‘echar las nasas’. Cuando echamos las nasas es con el único y exclusivo motivo de coger algún marisco o sea del ‘Working‘, ya que por muchas nasas que echo, si no pesco, no como.
Si ‘echo un nasa’ y pesco un zapato, ¿para que voy a seguir cultivando esa ‘Net’? O sea, por si no hablo claro. Si hago networking con un contacto y no fructifica nada, ¿realmente pensáis que es interesante el seguir manteniendo en ‘Net’?
Si es que lo mismo ocurre en la vida real. Tu red social (amigos) no suele estar mezclada con tu red profesional (contactos de negocio), aunque con el tiempo lleguen a interrelacionarse. Cuando vas a realizar un nuevo contacto comercial, no buscas ampliar tu abanico de amigos, sólamente buscas negocio (‘working’), entonces ¿por qué se nos quieren hacer ver por algunos que el networking es el sinónimo del buen rollito y la amistad verdadera, cuando conceptualmente es una red de contactos de negocio?
Lo peor es que con el apellido 2.0 se quiere ocultar la realidad: ‘todos buscamos de alguna u otra manera hacer business’.
Mucha gente fue al EBE (o por lo menos alguna) pensando en que el ‘buen rollito’ del networking que hay en la Red se ‘palparía’ en el ambiente, y lo que realmente se palpaba (y opino de oídas) es que se han formado ‘ghettos de pseudogurús dospuntoceristas’ que se relacionan de forma endogámica y que se interactúan entre ellos mirando al resto como si estuviesen infectados con algún virus altamente contagioso.
Entiendo que lo que pasa es que ven al resto de la gente como competidores, no se si de su negocio floreciente en la Red o bien de que pudiesen hacer temblar su estatus de pseudogurús, o sencillamente para que no salgan a la luz sus miserias como personas. Vete tú a saber.
Aún así, yo soy de los que cuando va a eventos 2.0 en el 1.0, sigo yendo con la esperanza de que a quien conozco en la Red sea como creo que es, aunque luego me lleve ligerillos chascos.
Y con todo esto no critico las actitudes de las personas en la Red, para nada de eso, cada uno entra en las redes sociales con un motivo. No seré yo el que alce la voz contra quienes buscan en la Red hacer negocios, para nada, es digno y respetable.
Lo que si me parece mal es el hecho de que se venda una imagen del 2.0 de networking, colaboración y amiguismo, que dista mucho de lo que realmente ocurre cuando lo que realmente lo que se persigue es beneficiarse de eso para un descarado lucro propio (y me tengo que morder la lengua para no dar más datos). Si entras con un motivo determinado, ¿para qué enmascararlo? Fácil respuesta, porque mucha gente si se seupiesen de verdad sus verdaderos intereses y no el halo que la envuelve no tendría ni el 1% de sus seguidores o amiguetes dospuntoceristas.
O sea, lo que abunda en la Red es mucho caza ‘Net‘ (seguidores, followers,…) y poco ‘Working’, o sea, negocio y a la vez pocas ganas de trabajar porque ese Net sea de verdad una red.
Muchos pensamos así, pero no se levanta la voz para que la Inquisición 2.0 no encienda la leña de las hogueras.
Hola José,
Cómo ya te he comentado por Twitter creo que te has despachado muy a gusto!!jejeje…pero muy bien justificado y aclarado!eso sí!la verdad es que no he asistido a muchos eventos, ni tengo mucha relación personal con este entorno, pero una cosa sí tengo clara, en las redes sociales todos entramos con un objetivo marcado y lo seguimos sin importarnos nada: ya sea hacer negocio, notoriedad, buscar trabajo… y quien diga lo contrario miente.
Aparte puedes obtener alguna relación más cercana, pero creo que lo habitual en estos días es todavía que la mayor parte de tus amistades sean 1.0
Un saludo crack!
Gracias amigo Fran.
Ten cuidado que está la Inquisición 2.0 con ganas de echarme a la hoguera, jejeje y te aseguro dos cosas: por un lado es verdad y por otro que son ellos mismo los claros ejemplos que menciono en el post.
Hacer Net es algo genial, da igual que sea en el 1.0 como en el 2.0, lo triste es cuando creas el NEt oensando solo en el Working y te escudas en ello y engañas a la gete, (si te contase alucinariasde algun caso).
Me encanta la gente que demuestra sus dos caras, la social y la laboral, de hecho eso es interactuar. Lo que hacen muchos es ‘ACTUAR’ y eso, ya no me gusta tanto.
Un abrazo amigo
Creo que a eso se le llama frentismo o las dos realidades contrapuestas 2.0 – 1.0 . En galicia facemolas queimadas pra espantar os meigallos, que che poden contar!!!!! Un abrazo 😉
Ti si que sabes Fco Xosé.
No 2.0 é ós Gurus igual que a Galicia 1.0 e as meigas : ¡haberlas hailas! Pero por riba, no 2.0 hai meigas, gurus, pantasmas e outras especies en vias de desaparecer. 🙂
Unha aperta amigo
Hola José Luis:
Me parece muy coherente y nada ofensivo tu artículo.Desde mi pinto de vista, en realidad no hay tanta diferencia entre el 1.0 y el 2.0 si estamos hablando de la conducta de las personas. Lo único, que puede dar la sensación de que es más amigable el entorno, pero eso quizás sea por el efecto multiplicador. Al final, en la vida, cada uno busca sus sitio de acuerdo con sus objetivos y/o necesidades. Y ésta no es ni 1.0 ni 2.0: es simplemente vida.
Un abrazo
Muy buena reflexión Fernando.
Son dos partes de la personalidad de cada uno con lo cual el utilizarlas de una forma u otra dependerá de las personas y no de las herramientas que emplee. El que es un impresentable en el 1.0 lo será en el 2.0. Las herramientas ayudarán a taparlo, pero al final todo sale.
Caen por su peso, y ya empiezan a caer. 🙂
Un abrazo.
Hola José Luís,
Me parece muy adecuado tu post y con educación como lo haces tú se puede decir todo sin problema.
No olvidemos que el 2.0 esta manejado por personas y pese a quien pese al final nos comportamos como lo hacemos en el 1.0, es decir, que la persona que sea egoísta y hedonista en su vida diaria lo seguirá siendo en la virtual aunque intente mostrarnos lo contrario. En el 2.0 como en la vida diaria al principio todo es buen rollo y todos son muy amigos hasta que comienza el contacto más directo y ya comienza a resquebrajarse la unidad del grupo y aparecen subgrupos. Lógicamente esto no me parece mal, sin embargo, es la realidad que muchos pretenden tapar. Muchos gurus del 2.0 son idealistas y su emblema de bandera es “Consejos doy pero para mí no tengo” y así no son las reglas del juego porque antes de nada se debe dar ejemplo de lo que tanto se presume.
Saludos,
Juan
Buenas Juan.
La duda que me embarga en todo esto es que si la gente es como es ¿quién es el malo? ¿el mundo 2.0 o las personas que entran en el? Son todas un reflejo de su vida real, pero con las herramientas 2.0 han conseguido tapar muchas de sus miserias y vender una imagen que no tienen. Eso les ha venido muy bien a los ‘miserables’ (como personas) que han crecido personalmente a costa del 2.0 defendiendo unas ideas que nunca tenian pensado seguir.
A veces da pena haberse metido en el 2.0, porque para ‘fantasmas’ ya esta el 1.0 lleno 🙂
Un abrazo
Y no será (y creo que lo hemos comentado en ocasiones anteriores) que llevamos nuestro «yo» físico a nuestro «yo» virtual.
Es decir, que en el fondo lo 2.0 es la etiqueta de una herramienta, como «martillo» o «máquina de escribir». Que son quienes usan la herramienta la que le dan el tono al uso y al resultado.
Yo observo, en mi red de contactos en la red, primero que tienden a ser el mismo grupo en las distintas plataformas, aunque se vaya ampliando poco a poco. Digamos que la confianza hace, como en la vida real, que tiendas a relacionarte de manera más abierta con quien ya tienes ciertos antecedentes. Cuando esos contactos se vuelven físicos en, por ejemplo, un EBE, volvemos a repetir estos comportamientos. Nos alegramos de encontrar a ese «grupo» virtual que, sin pretenderlo, se ha ido formando. Y como somos sociales, nos cohesionamos y evitamos a los que no conocemos.
Segundo, que tendemos a señalar los vicios de la red cuando tenemos, como nunca antes, un poder real de elección. Ya no cabe la excusa aquella de «es lo que echan». Tú decides. Por ejemplo, yo sigo antes a un @joseldelcampo que a un @edans, porque YO lo escojo. Si hubiera ido al EBE me hubiera gustado más conocer al primero en persona y tomar un café e intercambiar algunos comentarios del mundillo que escuchar una conferencia del segundo -en caso de que hubiera ido, que lo ignoro-.
No sé si me explico o me enrollo, lo que tampoco sería raro… XD
(Tu reflexión, 100% acertada. Para leer y pensar.)
Gracias amigo Angel.
Para nada te enrollas y te entiendo perfectamente. Y es que es así como bien dices. La prolongación de la personalidad de cada uno de nosotros en la vida real es lo que va al 2.0. Lo que me dificulta más la situación actualmente es que mucha gente a caballo del 2.0 quiere cambiar su personallidad y eso no lo consiguen las herramientas como bien dices. Las herramientas 2.0 no cambian ‘formas de ser’ de las personas y tarde o temprano, como pasa en la vida real te llevas sorpresas para bien o para mal con tus contactos.
Las desvirtualizaciones es lo que tiene, que generan expectativas que pueden que sean demasiado buenas o viceversa con lo cual nosotros mismos ponemos el listón de lo que esperamos en la interrelación.
Ojala todos fuesemos prolongación del 1.0 en el 2.0 tengo seguro que no habría tanta obsesión por los followers o seguidores, porque realmente, conociendo a una persona y siendo asi en realidad, ya la ceptarías o no en tu círculo. Lo que ocurre es que lo que pasa es que ahora aceptamos a ‘quien crees que es esa persona’ y al cabo de un tiempo nos damos cuenta de que ni en pintura se parece a la imagen que quiere vender. O sea, buscamos contactos por el ‘aura 2.0’ y no por la realidad.
Un abrazo
Hola José Luis,
Cuando se trata de personas al final da lo mismo el 1.0 o el 2.0. Esto es como una relación o un «rollito». Primero te pones la careta que supones espera ver el otro en ti, con el tiempo la careta se te cae y apareces tal cual eres. Lo mejor es ser el mismo en los dos ámbitos y desde el principio. Pero somos humanos.
Personalmente prefiero el 1.0, el calor humano, sentir a la otra persona en vivo y en directo. La máquina, el teclado, es frío y nunca sabes si aquel con el que conectas es tal y como parece ser. Pero va con el medio.
Sólo he conocido en el 1.0 a tres personas que venian del 2.0 y me han parecido estupendas. Quizá no espero demasiado, o simplemente me parece estupendo conocer gente y chatear en el bar.
Un abrazo,
Buenas Enrique.
Tu en eso te pareces más a mi: ‘nos manejamos menor en las distancias cortas’.
Yo en mi caso ha sido de al revés. He desvirtualizado a alguna gente y pocas considero que haya merecido la pena omo personas, no hablo nunca de contactos comerciales.
Lo que más me sorprende es que despues de desvirtualizados resulta que siguen con el mismo trato cuando a las claras sabes que no sn ni por asomo asi en la realidad.
Es una forma de autoengañarse pero allá cada uno con lo que se sienta feliz.
Un abrazo y buen finde.
buenas tardes, José Luis.
Este artículo podría servir para reforzar el anterior. No lo encuentro tampoco nada ofensivo, al contrario, dices lo que en realidad sucede.
Coincido también con Juan y con Enrique: con el tiempo, por más que alguien haya intentado vender una imagen que no se corresponde con la real, ésta se impone. Sin embargo, olvidamos que a veces nuestra forma de expresarnos por escrito nos da muchas pistas; a algunos desde un principio se les podían palpar entre letras las intenciones aunque estuviesen camufladas. No dejamos de ser la misma persona la que se esconde detrás; otra cosa es que nosotros no lo viéramos venir:-).
Un beso.
Buenas Bego.
Es que me consta que eres de las pesonas que más a conciencia lee los post de los blogs y sobre todo entre líneas, por lo cual puedes percibir lo que yo comento sin problemas ninguno.
Un besazo amiga.
Jajaja! qué va, amigo mío!. Con toda la confianza te lo digo (entre líneas, sólo lo entenderemos tú, yo y alguien más): sabes que yo también caí en la trampa en su día. A veces, estamos ciegos, existen personas que son excelsas en la manipulación; y algunos, incluso por casualidad, hasta los que van de más inocentes, saben explotar nuestras debilidades y utilizarlas en su propio beneficio:-). El ego es una mala cosa, y hasta el menos ilustrado puede, en un momento concreto, embaucarnos a través de nuestra debilidad, y sacar provecho. Hay que pasar página, y seguir nuestro camino, disfrutar de lo bueno con aquellos que aportan y con lo que nos aporta. Lo demás, son experiencias; experiencias que nos indican que vivimos en el mundo real, no en el artificial, en el cual se reproducen los mismos defectos.
Un beso.
El ego es mal compañero de viaje amiga Begoña, de eso no hay duda, pero siempre se acaba descubriendo al que lo tiene muy subido.
Lo buenos es descubrirlo lo antes posible 🙂
Un besazo