Hoy me he hecho una reflexión como las que le gustan a mi amigo Senior que me consta que le encantan. Una persona en blog en el que colaboro me ha pedido un consejo. Exactamente me ha dicho: «me gustaría que me dieses tu consejo«.
Yo tengo un lema: «No hay peor consejo, que aquel que no te han pedido». Y es la verdad, meterse a aconsejar donde nadie te ha dado «vela» siempre acaba conduciéndote a sitios indebidos.
Cosa muy distinta es cuando te piden un consejo o una opinión. Y mi reflexión hoy fue la de ¿aconsejar y opinar no es lo mismo? Aunque la gente crea que son sinónimos, ambos llevan aparejado diferentes procesos o mejor dicho estímulos mentales.
Una opinión se le puede pedir a cualquiera y será tomada como tal, con mayor o menor valor para el que la solicita y el que la realiza más o menos se siente liberado de influir con su opinión en la persona que se la pide. Con lo que muchas veces pedir opinión no te aclara nada pero tampoco compromete a la otra parte.
La opinión lleva aparejada mayor relajación en la respueta a dar.
Cosa distinta es cuando lo que te piden es un consejo. Si expresamente te piden que aconsejen en una determinada cosa, es porque el interlocutor te ve como una posible solución a lo que te plantea, con lo que el «aconsejador» empieza a experimentar una carga a sus espaldas, que realmente es un sentimiento o sensación de responsabilidad. Esta realmente acaba condicionando la respuesta que va a dar, porque sabe que este consejo puede ser decisivo para la persona que lo solicita.
Mide mucho más las palabras a usar al dar el consejo así como intenta visualizar las consecuencias de lo que va a decir. Pero en realidad esto pasa siempre, somos humanos, inseguros por naturaleza y siempre queremos buscar un consejo como medio de aprobación de alguna de nuestras actuaciones.
Una vez alguien dijo: «Experto es aquel que ha cometido todos los errores posibles en algna cosa». Cuando alguien te pide un consejo suele ser porque te considera un experto en ese área, con lo que lo primero que debes de realizar es un autoanálisis de si estás capacitado o no para aconsejar.
Si estás capacitado, adelante. Ten en cuenta que tu consejo va a coger un peso específico.
Pero si no te ves capacitado, lo mejor que debes de hacer es hacérselo saber a quien te lo solicita y aclararle que no estás en posición para aconsejar sobre el tema, pero si que puedes emitir una opinión sobre el mismo más o menos fundada.
Mucha gente es de la idea de que opinar es gratuito, por eso todo el mundo opina sobre todo y eso lleva aparejado el que se produzcan tantas malas interpretaciones. Aconsejar ya no lo puede ni debe de hacer todo el mundo. Tienes que poseer una historia personal o profesional que te permita hacerlo, porque frente a las opiniones, los consejos no son gratuitos.
Tu eres el que sabes si estás capacitado paa saber si puedes aconsejar o no.
Tal cual. Eso me aclara varias cosas. En el ambiente inmobiliario tenemos el avalúo y la opinión de valor. Esta segunda no se cobra, pues abarca solo un rango amplio del valor de algo. El avalúo es una foto de una película, con mucha investigación y experiencia implícita; dificil de hacerlo gratis.
Entonces, opinión es a opinión de valor, como consejo lo es a avalúo
Salutti,
Alberto
Buenas amigo.
Muy buena similitud, efectivamente.
Y añadiria más, el avaúo, implica cierto grado de responsabilidad en lo que haces, y eso te carga de responsabilidades (valga la redundancia).
Un abrazo amigo
¡Hola José!
Qué ciertas tus palabras, yo odio que la gente opine libremente sobre asuntos de los que, muchas veces, desconoce o tiene una idea muy básica.
El hecho de opinar sin pensar en las consecuencias, en ocasiones, conlleva resultados atroces.
En cuanto a lo de pedir consejo, es importante poder contar con personas con experiencia en tu problema, pero teniendo claro que la decisión final va a ser tuya, ya bastante peso cargas sobre la persona que te aconseja, como para hacerle culpable de los resultados si finalmente no son los deseados…
Sin duda, opinión y consejo son muy diferentes.
¡Un saludo amigo!
Buenas amiga.
Efectivamente, tenía yo un amigo que decía una verdad como un templo: «las opiniones son como los cul**, cada uno tiene uno». Y es verdad. Hay tantos seleccionadores de futbol o presidentes del Gobierno como personas que opinan, pero solo puede haber uno, y habrá que darle un cierto grado de libertad de actuación, pero como digo yo, opinar no tene consecuencias.
Me enfada cuando sale cualquiera en estas épocas diciendo que las cifras del parao o del PIB van a llegar a tanto y acuanto. Lo unico que generan es alarmismo, y si al final no llegan, ¿que responsabilidad tienen por haber sembrado el pánico? Ninguna.
Un abrazo
Para los consejos no deseados hay una respuesta que me gusta especialmente… «agradezco mucho tu consejo, pero ya sé equivocarme solo». Siempre acompañada con una sonrisa, claro.
Muy bueno amigo JFA.
Y es que muchas veces, un consejo mal dado es un punto de partida de serios problemas.
Un saludo
Yo estoy pasando una situación bastante dificil sufro de depresión y no lo sabia ahora que lo empese a comprender me da miedo e sido un mal hombre pero quiero cambiar quiero entregarle mi vida a DIOS no soporto mas ser un alcoholico y ver como destruyo la vida de gente q me ama estoy realmente mal y no se q hacer tengo mucho miedo muchos problemas y no se que camino seguir