¿A alguien le cabe alguna duda de que a la mujer siempre se le ha llamado de un modo erróneo el «sexo débil«?
Yo no tengo ningún tipo de duda al respecto sobre el error de esta afirmación.
El problema a mi modo de ver ha sido que desde siempre nuestro sistema de creencias se ha basado en la «masculinidad de la cultura». Siempre el hombre era el que había sido creado por Dios y de una costilla suya surgió la mujer. Siempre la mujer supeditada a la llevanza de la familia y ser el hombre el «cabeza de familia» que tuviese que afrontar el llevar a casa para comer. La mujer poseía menos derechos que los hombres y en muchas culturas,aún hoy en día, es considerada un ser inferior.
Son roles que la cultura occidental ha ido inculcando en nuestras mentes y que cuando se van rompiendo causan sorpresa y a mucha gente alegría frente a otra que no le causan tal. Esterotipos o mapas mentales son los más difíciles de romper (como dice muy bien Stephen Covey o Joel Baker, cuando hablan de romper paradigmas).
Las creencias o estereotipos son tales porque están para romperlos, para ser desmontados y esto está ocurriendo todos los días.
Hoy me ha sorprendido la noticia de que el número de mujeres que forma parte de los consejos de administración ha subido en el último año un 47%. Pero no es esto lo que me sorprende. Lo que me sorprende es que esto sea noticia y más en los tiempos que corren.
Está claro que las primeras mujeres son las que rompieron los moldes y las normas, pero ya en los tiempos que estamos en el siglo XXI que se considere noticia y relevante en titulares esto, me parece que lo que confirma es que todavía los estereotipos y las barreras mentales están hay.
Noticia sería que pasase esto y no se dijera nada, se considerase como algo normal y habitual. Pero por desgracia no es así. Cierto es que las cosas no cambian de la noche a la mañana, pero ya hace tiempo que estamos diciendo esto y seguimos con la misma cantinela.
Esperemos que las próximas generaciones ya no crezcan con estos estereotipos mentales, pero eso dependerá de los educadores o de lo que les formemos nosotros, porque el sistema de creencias de cualquier persona arranca desde la infancia, y es donde se dan por verdaderos comportamiento y actuaciones que a la postre se demuestra que son erróneas.
Solo me queda un consuelo, que lo que ha tardado siglos en inculcarnos en nuestras cabezas, por lo menos tardemos menos en desmontarlo de ellas.
Hola, José Luis.
Desde luego que, afortunadamente, cada vez quedan menos personas que piensan así, por lo menos en nuestra sociedad -en otras culturas, como comentas, aún están bastante más retrasados.
De momento este tipo de noticias seguirá siéndolo, porque aún queda mucho camino por avanzar, supongo que ese aumento del 47% ha significado, por ejempo, pasar de un 10% a un 14,70% de mujeres en los Consejos de Administración (no sé las cifras, pero imagino que el porcentaje será muy bajo, quizás tú conozcas el dato).
Así que aún queda mucho que avanzar para una igualdad real. No digamos ya en el caso de los salarios, que normalmente eran un 20% inferiores para puestos similares…
Un saludo
Pablo Rodríguez
Efectivamente, el estudio esta condicionado a que no ponen de cuanto a cuanto pasa o supone ese 47%.
Yo te comento que en una empresa que trabajé, la cabeza visible pasó a ser mujer y casis todos los ditrectores regionales tambien y sinceramente no supuso un cambio traumático para nadie.
Cuando una persona demuestra su valía en su cometido es indiferente el sexo.
Un saludo amigo
Yo también me felicito por el dato que aportas, pero como todo valor absoluto, estoy de acuedo con Pablo en que tasas de crecimiento tan grandes sólo son posibles partiendo de datos muy bajos. Aunque no tengo a mano el dato, mi mujer es vicepresidenta de una asociación de empresarias y se lo preguntaré pero me da que ni siquiera el 10% indicado se acerca a la realidad.
En lo que sí coincido es en el síntoma de buena salud que supone la normalización del porcentaje entre sexos y como bien indicas, en la empresa que trabajaste por ese motivo no se notó un cambio traumático lo que me da pie a manifestar dos aspectos que a mi modo de ver serán cruciales para las mujeres directivas:
1. El modelo de liderazgo femenino tendrá que ser distinto del masculino porque si no, poca impronta significará las conquistas de las mujeres. Y de momento, no se nota.
2. La llegada de las mujeres a puestos de altísima responsabilidad en las empresas ¿supondrá que en ellas las mujeres recibirán igual salario que los hombres desempeñando el mismo trabajo? De no ser así, poco se notará su llegada. Y vuelvo a decir lo mismo que antes, de momento no se ha notado.
Sabido es que Zamora no cayó en una hora pero algún signo debería empezar a verse. Citroen tuvo una presidenta mujer, también HP y muy poco se notó en relación a los temas que planteo.
En fin, menos tararí y más tarará.
Un saludo.
Muy bueno lo de menos tatarí y más tatará.
Efectivamente, como se suele decir, el movimiento se demuestra andando, y en esa actitud es en la que debería ser la situación normal.
Los % son relativos ya qe si no se sabe lo que aportan en cifra numérica en realidad, mal asunto y Pablo dio con el «intringuis» de la cuestión.
En mi caso puedo decir que el perfil de liderazgo impuesto por la mujer que empezó a dirigir la empresa no difirió mucho al de un hombre, dado al hecho que el liderazgo que mamó en su casa se las trae. Se trata de Aana Patricia Botín y su maestro Emilio Botín. Es un claro caso de como se lidera dando igual el sexo. (Bueno, perdón, lo de liderar es un decir, más bien se manda).
Un abrazo.
Hombre, sonará machista, pero en una sociedad donde predominaba la fuerza, donde no había control de la natalidad, pasaban todo el día embarazadas,…Quiero decir, que a parte de un cambio en nuestras mentes, ha habido un desarrollo que ha propiciado que lleguemos a donde estamos, me explico más, en Afganistán, donde la guerra era una constante, los crímenes, las violaciones, donde la posibilidad de vulnerar cualquier derecho es máxima…pues eso, llegan los talibanes que no sé si son buenos o malos, pero a lo que desde aquí somos reacios a entender le tenemos que buscar la respuesta en su contexto
La cultura es fundamental en estos caso, no cabe duda. Por muy buenas intenciones el entorno sociocultural , más bien diría yo, es el que maraca todo. No obstante me consta que aún en este país queda mucho por evolucionar en el ámbito cultural, sobre todo en la gente de determinada edad que ha estado acostumbrada durante muchos años a uno hábitos y usos o costumbres que son leyes.
Esperemos que las nuevas generaciones lo mamen todo desde pequeñitos, porque es en la infancia donde se crea nuestro sistema de creencias por el que nos vamos a guiar en el futuro y a traves del cual consideraremos lo que es bueno y lo que es maol.
Un saludo
Pues ya ves por dónde van los tiros. Las mujeres han logrado por sí mismas el primero de los hitos y también por sí mismas han de saber encontrar las claves del liderazgo femenino que espero sinceramente que sea mejor. Yo sólo planteaba dos acciones inmediatas para las que todavía no se aprecia avance visible.
Un saludo amigo.
Efectivamente amigo, el avance es percpetible en pocos sitios y además se ve con demasiada extrañeza.
Las mujeres deberán escalar muy poco a poco el cambio cultural, y cuentan con muchas voces en contra.
Pero poco a poo se irá consiguiendo.
Un saludo amigo