De la macro a la microeconomía, del ‘trilerismo’ estadístico, de los jubilados comprando deuda, y otras cosas del comer
Hace tiempo que no me detenía en el ‘coaching financiero‘, pero las consultas que me han realizado en los últimos días ‘casi’ me obligan a dejaros mi opinión de ciertos temas económicos que se están dando en estos momentos.
Del IPC y ese abismo entre la macro y la microeconomía
He leído en la mayoría de medios de comunicación ‘abrevados’ y escuchado a muchos políticos indicar que las cifras del IPC adelantado sitúa su variación anual en el 5,8% en enero, una décima por encima de la registrada en diciembre y que la tasa anual del indicador adelantado de la inflación subyacente aumenta cinco décimas, hasta el 7,5%, lo que indica que ‘vamos como un tiro’. Pero si eso no era poco, también nos hemos enterado que el PIB de España en 2022 ha crecido un 5,5%.
Cifras macroeconómicas que, en comparación con el entorno de la UE, OCDE y a nivel mundial, nos colocan como una potencia económica increíble.
No obstant, algo me extraña. Somos el único país que tiene la cifra de IPC por debajo de la inflación subyacente, algo que no deja de ser sorprendente. Ojo, que la el IPC se reduzca, no quiere decir que bajen los precios, simplemente es que crecen menos, no nos lleve a error.
Pero si vamos a la microeconomía, la del día a día, la de cualquier hogar español, las cifras ‘no cuadran’. Me he puesto en la puerta de dos supermercados con intención de realizar un experimento muy sencillo: ‘He preguntado a la gente que me dijese qué producto de los que compra en su cesta diaria ha subido solo un 5,8% entre diciembre de 2021 y diciembre de 2022?’ No creo que haga falta que os de la respuesta. Nadie fue capaz de decirme un solo producto que no haya subido en el último año un mínimo del 10-15%. Conclusión: de la macro a la micro, hay un abismo.
Del Trilerismo Estadístico
Pero es aquí cuando entra en juego el ‘trilerismo’ estadístico. Os invito a que visitéis la página del INE (Instituto Nacional de Estadística) donde se indican los cambios realizados para el cálculo del IPC desde este mes de enero pasado. Se han cambiado las ponderaciones de diferentes sectores para el cálculo nuevo del IPC dejándolos como véis a continuación:
Curiosamente tres son las partidas que pierden peso en la ponderación: Alimentos y bebidas no alcohólicas, Vestido y calzado y Vivienda. Justo las tres partidas que pesan más en el día a día del ciudadano, de la cesta de la compra, qué comer, como vestirse y dónde vivir. Las tres partidas que las familias dicen que son las que más se llevan su sueldo mensual y que más han subido, son justamente las que pesan menos en el nuevo cálculo del IPC. ¿Conclusión? Si el IPC no baja de forma real, cambio la fórmula de cálculo y ya baja de todas formas. Si esto no es ‘trilerismo’ estadístico, no se como se le puede definir.
Pero lo mismo ocurre en las cifras del paro dadas ayer mismo. Según las estadísticas oficiales, el paro sube en 70.744 personas en enero y se rebasan de nuevo los 2,9 millones de desempleados. Además, la Seguridad Social pierde 215.047 afiliados en enero. Datos francamente malos. Pero hete aquí que sale un ministro diciendo que son buenos datos porque, sin la estacionalidad, realmente ha disminuido el paro en 57.726 personas. Es más, indica que se van a cambiar los criterios para calcular las cifras de desempleados. ¿Conclusión? Si el paro no baja, ya hago yo que baje.
De los jubilados comprando deuda
Colas, leéis bien, colas de jubilados en las oficinas del Banco de España para comprar Deuda del Tesoro (Letras, Obligaciones,…). Tanta es la afluencia que el BdE hoy ha comenzado a dar cita previa, siendo la primera cita el 14 de febrero.
Se habla de que la web del Tesoro ha caído por el exceso de gente que quería entrar a la vez y que había gente a las 2 a.m. haciendo cola para comprar Letras del tesoro.
Y todo esto ¿por qué? Pues sencillamente porque las entidades financieras españolas han montado un ‘cartel’ (según el portal Bloomberg) en el que han acordado que no se remunere los ahorros de los clientes, lo que hace que la gente busque un refugio en algún producto financiero que le de algo de rentabilidad que le ayude a reducir lo que se pierde con le elevada inflación.
Y me pregunto, ¿dónde está la CNMC, el BdE y el BCE? En el resto de los países de la UE, las entidades financieras están remunerando los ahorros de los clientes pero en España no. ¿Habrá que abrir una cuenta en una entidad fuera de España para que nos paguen algo por nuestros ahorros?
Pero si queremos rizar el rizo aun más, ¿nadie se da cuenta que los jubilados están recibiendo sus pensiones gracias a la emisión de deuda del Estado y ellos, con sus ahorros, van a comprar esa deuda? ¿No se dan cuenta de que los jubilados que compren letras del tesoro se están ‘autopagando’ sus pensiones?
De otras cosas del comer
Y todo esto, acompañado de una subida ayer de 0,5% del Euribor y anticipada otra subida de la misma cantidad para el mes de marzo. O sea, ‘palo a los hipotecados’.
Cada revisión de hipoteca que se produce es un calvario para las familias. Pero los gobiernos centrales, léase, Reserva Federal Americana, Banco Central Europeo,…. siguen adelante con la política suicida de subida de tipos de interés cuando, en la situación actual de la inflación de oferta, se veía desde hace más de un año que era una solución errónea.
Hipotecas más caras, mayor coste y menor cantidad de dinero para la financiación de las empresas, subidas de las cuotas mensuales a los autónomos (incluido el ‘robo’ a los nuevos autónomos de tarifa de 80€ que se les ha cobrado casi 200€ mas por error según dice la seguridad Social).
Ojo, los combustibles están subiendo ‘céntimo a céntimo’ de forma silenciosa y eso que hablamos de precios del barril de petróleo similares ya a los que había antes del inicio de la guerra en Ukrania.
Si todo esto se une, el panorama no parece muy halagüeño. Pero bueno, mientras no suban el precio de ‘Netflix’, la cerveza siga más o menos estable y haya partidos de Champions, no hay problema.