Esta semana después de recorrer los blogs me he quedado encantado (y con más también, pero quería hacer un articulo sobre el Networking y este me da pie a ello) con un artículo de SM : «12 consejos para hacer Networking efectivo» y sobre todo por el debate abierto en los comentarios de esa entrada.
Me imagino que sabréis lo que significa en la práctica «Networking«. Sino os hago una rápida definición con mis propias palabras fuera de la «doctrina conceptualmente aceptada». Lo defino como la creación de tu red de contactos sociolaborales y que esos se extiendan y trabajen por ti.
Cuando se produce un evento en el que profesionalmente estás interesado o bien ves posibilidades de darte a conocer, te armas de tarjetero (cosa indispensable como podéis imaginar), acudes al mismo y te lanzas a realizar networking. Repartes más tarjetas de visita que cartas un croupier de un casino de Montecarlo.
¿Realmente pensaís que es efectivo este sistema? ¿Lo empleáis?
El intercambiar tarjetas por intercambiar en si es una tontería. Pero no más grande la tontería que registrarse en una web de empleo y esperar que por ese canal vas a encontrar el trabajo de tu vida.
Las relaciones, al igual que las plantas, hay que cultivarlas. En un evento al que acudes, siembras de tarjetas a todo el mundo presente e intentas recopilar el mayor número de tarjetas posibles ¿Para qué, para coleccionarlas? Yo tenía un conocido que coleccionaba tarjetas de visita a modo de «reconocimiento social» e imagen de «prestigio y reconocimiento».
Pues volviendo al simil de las plantas, una vez que tu has sembrado y recogido la siembra de los demás «networkers«, hay que empezar el cuidado de esa planta. Eso es lo que diferencia al networker del coleccionista de tarjetas.
Este último es como un ordenador, acumula información que en la mayor parte de las ocasiones ni utiliza, pero que ralentiza su funcionamiento. El networker trabaja sus relaciones, las clasifica, las perfila y por último las cultiva. Vacía el ordenador del material desechable y que ralentiza su funcionamiento para centrarse en lo verdaderamente útil, es decir, en los contactos realmante útiles y hacerlo de un modo práctico y sobre todo rápido.
Os puede parecer una postura un poco egoista, pero os hago dos preguntas y sus respuestas os valdrán de reflexión:
-¿Crees que la otra parte del networking no hace la preselección, clasificación, perfila y por último cultiva?
-¿Creéis que con el mercado laboral tan leonino como el que hay alguien cree que esta actitud es egoista?
Me imagino la mayor parte de las respuestas, por lo que vamos a seguir considerando el networking como una potencial herramienta y vamos a adentrarnos un poco más en ella.
Según las estadísticas publicadas por el INE, que creo que ya os comenté en artículos anteriores, un 80% de las ofertas de trabajo que se cubren en estos tiempos no salen ofertados al público, sino que son cubiertas por contactos privados. Realmente son cubiertas por la red de contactos de los demandantes de mano de obra, que ante la posibilidad de realizar la contratación por esta vía no recurren a otra forma de reclutamiento.
Si tus contactos son buenos, los has seleccionado de un modo adecuado y has cultivado su confianza, ¿no creeís que vuestra posibilidad de estar en ese 80% de ofertas de trabajo no publicadas aumenta? Pues claro que si.
Aquí reside en esencia el potencial del networking, la posibilidad de entrar en un proceso de busqueda laboral en el cual es imposible entrar de otro modo. Tu red de contactos interactúa con la red de tus contactos (valga la redundancia), con lo que el efecto multiplicador es muy interesante.
Y es el momento de hacer una prueba. Pensar en la gente que conocéis y en vosotros mismos y mirar como esllo y vosotros habéis conseguido vuestro/s últimos puestos de trabajo: ¿por anuncio libre al público o por contactos?
Ahora voy a hacer de abogado del diablo. ¿Cuál es el grado de conocimiento que debes de tener de un contacto para recomendarlo en una oferta de trabajo, teniendo en cuenta que en parte al recomendarlo tú, va tu propia imagen en ello? Este es un handicap que le encuentro al networking. ¿Cuándo puedes recomendar a alguien y cuándo no?
Es aquí cuando me voy a meter a «criticar» (pero siempre constructivamente) a las redes de networking de internet, como pueden ser Xing o Linked In.
Si alguno estáis registrados en estas redes, podeis ver como un contacto que posees a la vez posee otros contactos, con lo que es fácilmente visible el efecto multiplicador de las relaciones, pero ¿hasta qué punto? ¿Alguna vez os ha llegado la solicitud de amistad de alguien por estas redes que no tenías ni idea de quien es? A mi por lo menos si que me ha ocurrido. Sueles aceptar, con lo que de factura así, pronto llegarás a coleccionar contactos como el que hace networking en persona colecciona tarjetas de visita. Pasa lo de siempre, muchos de los miembros de estas redes busan tener el mayor número de contactos posibles como prestigio personal, cuando eso es un grave error. ¿Recomendarías a una persona para una oferta de enpleo cuando el único conocimeinto que posees de ella es el ser contacto tuyo en una red social por internet?. Pues eso.
Hay que cultivarlos, trabajarlos y hacerlos que trabajen por tí. he visto como personas en estas redes tienen 600 contactos, ¿me están diciendo que todos los días interacciona con ellos, o con la mitad, o con un 25%? No haría otra cosa que estar mandando mails todo el día.
A estas redes se le puede añadir una ventaja que si es considerablemente valorable: la posibilidad de hacer un networking con personas que es imposible que lo pudieses hacer de forma física. Internet es lo que tiene.
El networking físico posee la ventaja de poder hacerte una imagen de tu contacto o interlocutor de un modo rápido. Pero no todos podemos utilizar este método (por nuestro lugar de residencia, por la imposibilidad de desplazarse a eventos interesantes,…). Ante esto usamos el networking por internet, donde juega un papel importante las redes sociales y a mi modo de ver los «blogs». Como hace no mucho hice un artículo «Por su blog lo conoceréis...», se puede observar que la respuesta a este segundo tipo de networking exige de un proceso más largo de asimilación de información. En muchos casos, sigues a un blogger durante meses para saber o creer saber como es.
En definitiva, usando de un modo racional el networking, se convierte en una verdadera arma de busqueda laboral y además creo que muy potente a tenor de como se está poniendo el mercado laboral hoy en día (casi todo por contactos se mueve), pero exige de ser racionaly eficiente en su uso.
Recordar que todo en exceso es malo.
¿Hacemos networking?
José Luis. El networking como cualquier otra herramienta, presenta limitaciones de alcance y de forma, pero de que es fundamental para darnos a conocer y optimizar nuestra red de contactos, no creo que haya dudas.
Creo que el punto álgido es la forma en que se hace y ya eso depende de otros factores más personales y de actitud.
Post muy completo y educativo.
SM
Gracias amigo Senior.
Tienes toda la razón. Es una herramienta, y no todos valen para usarla. hay gente que por su personalidad es más retraída, y le cuestas hacer networking, ahora bien, es una herramienta muy potente de saberla emplear eso no me cabe duda, probablemente de las mejores hoy en día.
Un saludo amigo
No sé si en los países desarrollados ésto es algo nuevo. En los últimos meses es cuando más fuerza (por lo menos es cuando conocí el término) ha cogido el «networking»…. Pero ésto en mi país de orígen, en Ecuador, se llama palanqueo, y en españa: enchufe. Y es un término que siempre ha existido…. En Ecuador, donde los puestos de trabajo cualificados son escasos, el palanqueo era (y lo debe de seguir siendo) la única forma de acceder a ellos. Mis padres eran unos dioses del palanqueo, siempre tenían un amigo en algún sitio que les facilitaba encontrar trabajo… Me soprende escuchar un término que al decirlo en inglés suena mucho más refinado… pero que ha existido siempre.
Efectivamente amigo Marco.
Tenemos la tonta manía de cuando algo se dice en inglés es buenísimo y cuando es en castellano el sentido cambia por completo. Somos angloadictos, lo de fuera mejor, y su es aglosajón es el boom.
Pero siempre ha existido y existirá la red de contactos o sea «enchufismo» o «palanqueo». Es tan antiguo como el hombre.
Un saludo
Buenas amigo Pablo.
Lo de los blogs creo que es algo que se escapa de dentro de las herramietas 2.0, es ya algo más es un networking puro. Yo hice no hace más de un mes la entrada que comento en relación a que fui a dos entrevistas de trabajo y en una ya habían visto mi blog y en otra salió la conversación durante la entrevista e incluso el entrevistador se lo puso a ver.
Muchos se creen que con ver un blog se sacan conclusiones, y eso es un error. Puedes sacar buenas impresiones pero no conclusiones. El seguimiento continuado si que te da una imagen más fiel de como es una persona.
Lo de las redes de contactos es como la canción de «Quiero tener un millón de amigos…», pero realmente eso exige una dedicación que muchas veces no se puede tener.
Un saludo amigo
Habeis leido el libro «Nunca comas solo» ?
Comenta la diferencia entre un «conector» ( una persona que tiene contactos ) y un «coleccionista de tarjetas».
Es un libro muy interesante y cita ejemplos de personas que llevan el networking a la práctica ( Bill Clinton ) y cómo lo hacen .
Os dejo un link con un resumen del libro .
http://comunidad.uach.mx/rarroyo/resumenes/395NuncaComaSolo.pdf
Saludos
Muchas gracias amigo Francisco. No lo he leído, pero realmente el título engloba el secreto del networking, teniendo como esencia el que cualquier momento es bueno para hacer networking y que en cualquier sitio salta la oportunidad.
Voy a ojera detenidamente el resumen que nos dejas.
Un saludo