303.998 Despidos en España en el primer cuatrimestre de 2023
303.998 Despidos en España en el primer cuatrimestre de 2023 según los datos de afiliación de la Seguridad Social y que se identifican dentro del epígrafe de ‘despido’ (no bajas voluntarias ni otros conceptos). Hablamos de ‘despidos de toda la vida’.
Esta cifra supone un 48% más que los despidos que hubo en el mismo período de 2022 y es un nuevo récord de despidos desde que se analiza este dato en la serie histórica desde 2013.
Ahora bien, si los datos que continuamente da el Gobierno actual, en boca del Ministerio de Trabajo, indican que ‘nunca ha habido tantos españoles trabajando y que el paro consigue cifras récord, así como que el trabajo indefinido consigue cifras históricas’, algo no me cuadra.
Si analizamos solamente la cifra de ‘despidos’ que se sitúa en cifras nunca vistas y por otro lado, el trabajo indefinido, que según la actual ministra ‘gracias a su reforma laboral está en cifras históricas’, ¿alguien nos puede explicar que ocurre realmente?
Podríamos creer que estos despidos son empleados con contratos temporales que son despedidos y luego los vuelven a contratar como indefinidos, pero no parece que sea esa la explicación.
La explicación más plausible es que un gran porcentaje de los despidos sean trabajadores con contrato indefinido. Y aquí no incluimos los denominados como ‘fijos discontinuos’ que, por definición, al terminar los meses que trabajan al año no se contabilizan como ‘despidos’, ya que a efectos del Ministerio de Trabajo no están desempleados,
Si antes, el tener un trabajo indefinido suponía que las empresas eran reacias a despedir a estos trabajadores por el elevado coste que esto tenía y ahora, según indican las cifras, hay más despidos (cifra histórica), me hace pensar que estos costes se han reducido, lo que anima a las empresas a la hora de despedir a los denominados como ‘indefinidos’. Esto se traduce en un ‘abaratamiento del despido’, curiosamente lo contrario que pretendía la reforma laboral y de la que se saca pecho de forma injustificada a tenor de estos datos públicos.
Todo me hace pensar en que, lo que realmente ocurre, es que estamos ante una‘temporalización del trabajo indefinido’. Es decir, la etiqueta de indefinido en un puesto de trabajo tiene las mismas consecuencias económicas para la empresa en un despido que tenían antes cuando se hablaba de un trabajador temporal.
No me meto con que la cifra de indefinidos haya aumentado pero si me meto en conocer al detalle cómo es la calidad o precariedad de estos contratos indefinidos nuevos. ¿Qué mas da que a un trabajador le hagan firmar un ‘contrato indefinido’ si la empresa puede despedirlo con el mismo coste que antes despedía a un trabajador temporal? Simplemente es una etiqueta que maquilla las estadísticas propagandistas políticas pero que no se traduce en estabilidad ni calidad de trabajo para el empleado, que es lo que realmente debería ser.
Antes un ‘contrato indefinido’ era indicador de estabilidad, ahora no. Esa es la única explicación que puedo encontrar en estas cifras que presenta el Ministerio de Trabajo y que indican que el ‘maquillaje’ propagandístico está presente en todo momento.
Y solo a efectos de ejemplo, he visto recientemente como un trabajador era contratado como indefinido y era despedido en el período de prueba ‘por no cumplir las expectativas del puesto de trabajo’, con lo cual, ¿esto supone que sea un ‘contrato indefinido’ como lo entendíamos antes o sencillamente sea una cifra que engorde la supuesta contratación indefinida de la que sacan pecho los políticos pero que en la práctica sea lo mismo de temporal que los antiguos ‘contratos temporales’?
¿Qué más da que aumenten la cifra de trabajadores con contratos indefinidos para la estadística si en la práctica tienen la misma temporalidad que antes?