El CV sigue siendo el rey. Más que nada, porque es la primera imagen que se le queda a un reclutador del candidato y es el paso previo a la entrevista. Solo se llamará a aquellos perfiles que consigan captar la atención del reclutador. Da igual el formato del CV escogido, tradicional, online, videocurriculum,…., el caso es conseguir que te llamen para una entrevista.
Cuando conseguimos llegar a la entrevista, diferentes pruebas, medios o herramientas tiene en su mano el reclutador para poder conseguir sacar la información que precisa. pensar seriamente una cosa, seguro que lleva realizadas más entrevistas a lo largo de su carrera de lo que nos podemos imaginar, con lo cual es tontería e que le queráis engañar.
Desde pruebas psicotécnicas, pasando por significado de nombres, hasta pruebas caligráficas, infinitas son las pruebas que podremos afrontar dependiendo del perfil del reclutador y su experiencia personal, además del puesto al que se quiere optar y sus características, lógicamente.
Por eso cuando se habla de preparar una entrevista, no aconsejamos que pensemos en que herramientas podremos tener en frente que empleará el reclutador. Tradicionales, 2.0, entrevista personal, entrevista en grupo,…, no te deben de importar en ningún momento antes de su realización. Lo que debes de preocuparte realmente es de la actitud que vas a tener durante la realización de las mismas.
Cada puesto de trabajo tiene unos perfiles o habilidades determinadas que lo hacen diferente de otros. Cuando vas a una entrevista, con independencia de las herramientas que empleen en la misma o e el conjunto del proceso de reclutamiento, lo que debes de saber son cuáles son esas habilidades que debes de potenciar y que te pueden diferenciar del resto. Da igual las pruebas o metodologías que tengas que realizar, lo importante es que seas consciente de cómo debes de afrontarlas y que es lo que tienes que mostrar en ellas.
Mucha gente se centra en el mundo 2.0 porque ‘es la moda’, cuando al final, realmente, la entrevista cara a cara es lo que suele tener más peso aun hoy. Cierto que los medios sociales están en alza, pero son simplemente complementos de información a todas las pruebas que se venían realizando hasta la fecha por los reclutadores, no siendo, salvo excepciones, un elemento definitivo.
Por ese motivo, nuestra recomendación es que dejéis a un lado que tipo de pruebas te pueden pedir en una entrevista y que te preocupes mucho más de la actitud con las que las vas a afrontar. Eso realmente es lo que se acaba transmitiendo al reclutador.