Hace ya bastante que analizo las ofertas de trabajo de los periódicos y de los portales de empleo en cuanto a su contenido y he de decir que muchas de ellas no cumplen el requisito principal que deberían tener de concreción y claridad, optando por la generalidad en la exposición del puesto.
El contenido de las ofertas de trabajo debe ser específico, haciendo referencia a las principales funciones de esa posición, el nombre concreto de ese puesto, el tipo de empresa y sector y los requisitos determinados que se ofrecen para que la oferta resulte interesante a los candidatos, que simplemente, con leerla, sabrán lo que se ofrece.
Muchas empresas optan por ocultar el nombre de la compañía en las ofertas y poner sólo el sector de la misma, en más de una ocasión es porque son compañías que llevan mala fama y si ponen su nombre no recibirán apenas candidaturas. En otras ocasiones, algunas empresas no quieren publicitar sus ofertas para no recibir aluviones de candidatos por su renombre. También, las empresas lo hacen con varios fines, entre los que está el poder ver qué trabajadores de sus filas están buscando trabajo, aparte de reclutar nuevo personal. Cuando la oferta la publica una consultora externa de recursos humanos para algún cliente, en el 80% de los casos, no figura el nombre de la compañía hasta que los candidatos no lleguen a la fase final de proceso de selección.
El apartado que me hace mucha gracia es el dedicado por las empresas a los requisitos o condiciones ofrecidas, que suelen llevar mensajes generales, atractivos, que parece que dicen mucho y a la hora de la verdad no dicen nada.
Por ejemplo a la hora de mencionar las condiciones económicas, son muchas las empresas que mencionan “remuneración según valía” o “remuneración competitiva acorde con experiencia y capacidades aportadas” y muchos candidatos lo aceptan, pero luego se preguntan ¿Y eso qué significa? No sería más fácil poner una banda salarial con un mínimo y un máximo para que los candidatos se hagan una idea aproximada.
Seamos realistas. Las empresas, cuando ponen en marcha un proceso de selección directamente por ellas o lo externalizan con una consultora, conocen la remuneración máxima que pueden ofrecer. Si la pusieseis en las ofertas, no haríais perder el tiempo a determinados candidatos y no que estos os lo hagan perder a vosotras. Concretando más, hacéis que opten a ese puesto las personas que aceptan todas las condiciones y esto ya acorta bastante el proceso. Porque luego en la primera entrevista de corte preguntáis las empresas cuáles son sus aspiraciones económicas y cuánto cobran en la actualidad. ¿Por qué tanto misterio con la remuneración?
También están esos mensajes generalitas tipo “Grandes oportunidades de desarrollo profesional participando en asuntos o proyectos de primer orden” o “Plan formativo individualizado” o “excelente ambiente de trabajo” entre otras muchas que podríamos mencionar. Después, resulta en más de una ocasión que se cumple el dicho de dime de que presumes y te diré de que careces porque el ambiente luego suele estar enrarecido con problemas internos de actitud y comportamiento por todos los lados. Cuando se ponen mensajes se tienen que corresponder con la realidad porque sino estáis creando falsas expectativas que hará que las personas que se incorporen queden defraudadas poco después. Igualmente, las oportunidades de desarrollo profesional hay que concretarlas durante el proceso de selección en la última fase para que queden claras y cada potencial candidato que finalmente se incorpore sepa hasta dónde puede llegar su desarrollo profesional y cuál será su plan específico. Porque esto no se le olvida a la gente y después, cuando ven que van pasando los meses y que la evolución profesional no llega, ni llegará, se dan cuenta que sólo pueden conseguir algo mediante la queja constante. Lo mismo pasa con alardear de planes formativos particularizados y específicos para los empleados y luego resulta que el desarrollo formativo en esa compañía es casi inexistente y si esos trabajadores quieren seguir formándose tendrán que hacerlo por su cuenta en su tiempo libre. Estas cosas estáis en vuestro derecho de que os las concreten y más si son de importancia para vosotros.
Posteriormente en los requisitos que se requieren para poder tener posibilidades de continuar los candidatos en ese proceso y de llevarse el puesto es frustrante cuando algunas compañías ponen sólo un requisito imprescindible y los demás valorables porque esto hace que una avalancha de todo tipo de candidatos os hagan llegar su candidatura aunque no cumplan los requisitos valorables porque eso no tiene significado subjetivo. Las empresas deben indicar los requisitos concretos que son imprescindibles luego todo lo que se aporte extra se le dará un valor en su justa medida a nivel global. Es muy típico poner la frase de “imprescindible experiencia de dos años en el mismo sector profesional”. Normalmente, ciertos perfiles, en sus contratos especifican que al abandonar el puesto, no podrán incorporarse a otra empresa del sector durante X tiempo, por lo que… ¿para qué ponen este requisito si luego, ellos también incluirán la cláusula? Ciertamente, la experiencia en el sector puede ser un punto positivo, pero más lo es que el candidato sepa llevar a cabo sus funciones con eficacia. Ponerse al día del producto no es lo más complicado.
Para finalizar es muy frustrante ver en el desarrollo de las funciones a desempeñar, mensajes poco clarificadores para despejar dudas como “Gestiones propias del departamento”, “desarrollo de procedimientos”, “Supervisión del equipo de trabajo” por citar algunas. Se deben afinar al máximo las funciones concretas para que os lleguen las candidaturas más acordes posibles ajustándose a lo solicitado porque las funciones carentes de especificación hacen que a veces los candidatos más adecuados no opten al puesto por no ver claro el perfil.
¿Qué opináis de los contenidos de las ofertas de trabajo? y ¿Qué valoráis en las mismas para hacer llegarles vuestra candidatura?
Las empresas debéis de aprender y saber que lo que importa es la calidad y no la cantidad de los requisitos puestos en las ofertas de trabajo. Menos prometer y más cumplir lo especificado. Porque no sólo para poder exigir a los candidatos concreción y sinceridad las primeras que debéis de cumplir con el ejemplo sois vosotras. ¿A qué esperáis?
Autor: Juan Martinez